viernes, 10 de diciembre de 2021

Continúan la incredulidad y los placeres prohibidos


El escepticismo y aquello que se llama ciencia han menoscabado en gran medida la fe del mundo cristiano en su Biblia. Se aceptan alegremente errores y fábulas, para que puedan seguir el camino de la complacencia propia y no sentirse alarmados, porque no procuran retener a Dios en su conocimiento. Dicen: “Mañana será como hoy y habrá mucho más abundancia”. Pero en medio de su incredulidad y placeres impíos, se oye el clamor del arcángel y la trompeta de Dios [...].

Cuando en nuestro mundo todo sea actividad febril, inmersa en la ambición egoísta de ganancia, Jesús vendrá como ladrón.—Manuscrito 15b, 1886. Cuando los que profesan ser el pueblo de Dios se unan con el mundo, viviendo como él vive y compartiendo sus placeres prohibidos; cuando el lujo del mundo se vuelva el lujo de la iglesia; cuando las campanas repiquen a bodas, y todos cuenten en perspectiva con muchos años de prosperidad mundana—entonces, tan repentinamente como el relámpago cruza el cielo, se desvanecerán sus visiones brillantes y sus falaces esperanzas.—Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, 387 (1911).

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Progresemos y aumentemos nuestra eficiencia

El Señor desea que se siga proclamando con creciente eficiencia el mensaje del tercer ángel. Como obró él e...