Este mes también han aparecido 8.000 toneladas de sardinas en la desembocadura del río Queule.
De la misma manera, también se han descubierto miles de moluscos y de almejas muertas apiladas en la costa de la isla grande de Chiloé, así como tantas sepias muertas en las orillas de la isla de Santa María.
Los especialistas en el tema culpan a estas anomalías al fenómeno climático de El Niño, que causa el calentamiento de la superficie de las aguas en el ecuador del océano Pacífico, próximo al continente americano, elevándolas a temperaturas más altas de lo normal.
A ello se suma otro fenómeno conocido como el las mareas rojas, que se refiera a la presencia de pequeñas algas llamadas alexandrium catenella, que generan un veneno causante de parálisis en el sistema nervioso y que mata los moluscos y mariscos de la zona. Además, su consumo puede ser perjudicial tanto para otros animales como para los humanos.
Actualmente, los pescadores de la región de Los Lagos, en Chile, mantienen un bloqueo a los accesos a la isla grande de Chiloé en protesta por la escasa ayuda que reciben del Gobierno para reparar los efectos causados por la mortandad de estas especies marinas.
Fuente: RT