Escrito por Elena G. de White en la voz de Pablo A. Valencia Trujillo 30 de Mayo La promesa de nuestra aceptación Y Jesús, después que fué bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vió al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él. Y he aquí una voz de los cielos que decía: Este es mi Hijo amado, en el cual tengo contentamiento. Mateo 3:16, 17
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