Una mujer se somete a
un examen médico en la clínica Gurukul, patrocinada por la Iglesia
Luterana, en Chenai (India). © Paul Jeffrey/CMI
23 de Febrero 2017
Versión en español publicada el:
28 de Febrero 2017
Estamos al inicio
de la carrera para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y el
Consejo Mundial de Iglesias (BABILONIA) está convencido de que es el momento
de que la iglesia reafirme el papel que ha desempeñado durante siglos
como líder mundial de la salud, y de que consolide sus esfuerzos en pos
de la salud y la sanación para todos”, dice la Dra. Mwai Makoka,
secretaria ejecutiva del programa de salud y sanación del CMI.
El 27 de febrero el CMI se
reunirá en Maseru (Lesoto) para iniciar el proceso para diseñar una
estrategia mundial ecuménica de salud, siguiendo el importante legado de
las iglesias en materia de atención sanitaria y misión a lo largo de la
historia.
“Hace siglos que la iglesia se dedica a
prestar atención sanitaria”, explica la Dra. Makoka, “y lleva años
insistiendo en que hay una manera cristiana particular de entender la
salud y la sanación que debería dar forma al modo en que las iglesias
prestan atención sanitaria”.
“La iglesia tomó consciencia muy
pronto de que la salud va más allá de la medicina, que es más que el
bienestar físico o mental, y que la curación no es ante todo médica”,
añade Makoka.
El primer paso hacia la preparación de
la estrategia será la consulta del 27 de febrero, que tendrá lugar en
el marco de la octava conferencia bienal de la Plataforma de
Asociaciones Cristianas de Salud de África, en Maseru (Lesoto). La
consulta reunirá a líderes de las iglesias de África, jefes de las
asociaciones cristianas de salud africanas y organizaciones eclesiales
de Europa y de los Estados Unidos de América.
Habrá una segunda consulta el 24 de
mayo, en el Centro Ecuménico de Ginebra, que contará con la
participación de muchas iglesias, así como de varios organismos de las
Naciones Unidas y de otras organizaciones.
“El CMI mantiene firme su compromiso con la salud y la
curación para todos, y recientemente ha reiterado que ambas eran
elementos fundamentales del ministerio de Jesús y de su llamamiento a
sus seguidores,” concluye Makoka.
“Y tal y como aprendimos en ‘Juntos por la vida’,
es el Espíritu Santo lo que ‘da poder a la iglesia para asumir su
misión de promover la vida, que incluye la oración, la atención
pastoral, y la atención de salud profesional por un lado, y, por otro
lado, la denuncia profética de las causas del sufrimiento, mediante la
transformación de las estructuras que son causa de injusticia, y la
continuación de la investigación científica’“. (“Juntos por la Vida”, p.
50)
“Juntos por la vida” es una publicación del CMI que
sirve como herramienta para que los cristianos renueven sus ideas sobre
la misión cristiana, y que presenta una nueva afirmación de la misión
ecuménica. http://www.oikoumene.org/es/press-centre/news/wcc-to-develop-global-ecumenical-health-strategy-starting-in-lesotho