El secretario de Guerra, Pete Hegseth, ostenta uno de los cargos más influyentes del gobierno federal. Como jefe del Departamento de Guerra, funge como principal estratega militar del país y asesor principal del presidente en materia de guerra y defensa nacional. Sus decisiones influyen no solo en las operaciones de las fuerzas armadas estadounidenses, sino también en la política internacional.
El 20 de septiembre de 2025, Pete Hegseth publicó un video en la cuenta oficial del Secretario de Guerra de Estados Unidos (X) en el que recitaba el Padrenuestro mientras imágenes de aviones de guerra, tanques y bombas aparecían en la pantalla. [1] En esta demostración, se utilizó la fe para justificar el uso de la fuerza y se emplearon textos bíblicos para hacer que la violencia pareciera aprobada por Dios. Sin embargo, la verdadera religión busca la paz y la reconciliación, no la dominación.
La fusión de la oración de Cristo —una súplica sagrada por la paz y el perdón— con símbolos bélicos transmite un mensaje peligroso y profundamente contradictorio. En el fondo de este asunto reside el principio de separación entre Iglesia y Estado, consagrado en la Primera Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos. El Secretario de Guerra, en el ejercicio de sus funciones, no es un simple ciudadano, sino un representante del Estado. Al invocar el Padrenuestro a través de los medios oficiales del gobierno, presenta a las fuerzas armadas estadounidenses como un ejército cristiano que participa en una guerra con sanción divina, una imagen que contradice directamente los fundamentos mismos de la libertad estadounidense y la libertad religiosa.
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