El domingo 12 de septiembre de 2021, el Papa Francisco voló a Eslovaquia y se reunió con representantes del Consejo Ecuménico de Iglesias de Eslovaquia. Se trata de una asociación del Consejo Mundial de Iglesias formado por Iglesias Evangélicas, Ortodoxas, Bautistas, Metodistas y Reformadas. Los católicos romanos y los adventistas del séptimo día se consideran "miembros asociados" y tienen un estatus de observadores dentro del Consejo Ecuménico de Iglesias de Eslovaquia. [1]
El encuentro se celebró en la Nunciatura Apostólica Vaticana, también conocida como misión diplomática de la Santa Sede en Eslovaquia e incluyó a representantes de las diferentes iglesias. En su discurso al encuentro ecuménico, el Papa Francisco expresa que todos deben ser “ semilla de unidad y fermento de fraternidad ”. El Papa también llamó abiertamente a la “ plena comunión ” entre las diferentes iglesias. El Papa Francisco dijo:
“Como testigos de un cristianismo todavía marcado por la unidad y el celo por la predicación del Evangelio, que nos ayuden a perseverar en nuestro camino fomentando nuestra comunión fraterna en el nombre de Jesús. En realidad, ¿cómo podemos esperar que Europa redescubra sus raíces cristianas cuando nosotros mismos no estamos arraigados en la plena comunión ? ¿Cómo podemos soñar con una Europa libre de ideologías si no tenemos el valor de anteponer la libertad de Cristo a las necesidades de grupos individuales de creyentes? Es difícil esperar que Europa sea cada vez más influenciada y enriquecida por el Evangelio si no nos preocupa el hecho de que en este continente todavía no estamos completamente unidos y no nos preocupamos los unos por los otros ”. [2]
Las relaciones interreligiosas eventualmente nos llevarán a la plena comunión con Roma. La visión del Papa es la de una Europa “cristiana” (católica) unida y un mundo unido. El llamado del Papa Francisco a la “plena comunión” es parte de la hermandad universal que está tratando de crear. Insta a las iglesias a que adopten su encíclica Fratelli Tutti, que intenta superar todas las diferencias religiosas. Es un llamado a llevar a católicos y protestantes a la plena comunión. Pero va más allá. La hermandad universal del Papa afirma todas las religiones, incluidos los sistemas de creencias no cristianos del ateísmo y el culto a la naturaleza, y eleva a Krishna, Buda, Muhammad, Gaia (la Madre Tierra) y los médicos brujos al mismo nivel que Jesús. Todos los sistemas de creencias son santos y todos contienen la verdad es el mensaje del Papa.El Papa continuó diciendo que las iglesias deben trabajar juntas con acciones "concretas" para superar los "prejuicios y malentendidos":
“La unidad no se logra tanto con buenas intenciones y acuerdos sobre algún valor compartido, sino haciendo algo concreto, juntos , por quienes nos acercan más al Señor. ¿Quienes son? Son los pobres, porque en ellos Jesús está presente (cf. Mt 25, 40). Compartir en obras de caridad puede abrir horizontes más amplios y ayudarnos a avanzar más en la superación de prejuicios y malentendidos ". [2]
El Papa tiene una nueva agenda para las iglesias. Quiere que trabajen juntos en la doctrina social católica y las causas liberales y esto nos ayudará a superar nuestros "prejuicios y malentendidos". No se equivoquen, estos gestos ecuménicos del Papa están diseñados para cambiar nuestros sentimientos hacia Roma. Es una invitación de Roma a los protestantes para que pongan fin a la protesta. La inspiración dice que los protestantes apóstatas serán los que cederán y comprometerán la fe para que la herida mortal pueda ser sanada:
“Aquí viene la gran crisis sobre el mundo. Las Escrituras enseñan que el papado debe recuperar su supremacía perdida, y que el fuego de la persecución se reavivará a través del tiempo que sirva a las concesiones del llamado mundo protestante . En este tiempo de peligro sólo podemos estar de pie si tenemos la verdad y el poder de Dios ”(1888 Materials, p. 901).
El Papa Francisco terminó su mensaje al grupo ecuménico lamentando que católicos, protestantes y ortodoxos aún no hayan entrado completamente en la unidad "eucarística":
“ Que el don de Dios esté presente en la mesa de todos, para que, aunque todavía no podamos compartir la misma comida eucarística , podamos acoger juntos a Jesús sirviéndole en los pobres. Será un signo más elocuente que una multitud de palabras, y ayudará a la sociedad civil a comprender, especialmente en estos tiempos convulsos, que solo estando del lado de los más débiles podremos todos, juntos, sobrevivir a la actual pandemia ”. [2]
La unidad eucarística es incompatible, con o sin pandemia. Los sistemas de creencias protestantes y católicos no son los mismos cuando se trata de la verdad bíblica, incluido el pan y el vino. Pero a pesar de este obstáculo, trágicamente muchas iglesias, incluidos los Adventistas del Séptimo Día en Italia, están aceptando el grave error de participar en la unidad eucarística con Roma. [3] ¿Nos hemos olvidado de lo que escribió el profeta?
“ Hay una diferencia tan grande en nuestra fe y la de los profesantes nominales, como los cielos son más altos que la tierra ” (Spiritual Gifts, Vol. 2, p. 300).
Dado que la unidad eucarística es parte del plan del Papa para las iglesias, esto es algo que las diferentes religiones continuarán adoptando mientras trabajan por la paz, la hermandad, la solidaridad y la unidad eucarística, compartiendo el mismo pan y vino. Pero Dios dice:
“ Porque cuando digan: Paz y seguridad; entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina , como los dolores de parto a la mujer encinta; Y ellos no escaparán." 1 Tesalonicenses 5: 8.
La palabra de Dios no predice una utopía pacífica. Predice la guerra, el hambre, la pestilencia, los terremotos, la angustia de las naciones con perplejidad y la abominación romana que traerá la desolación final. ¿Son estos signos evidentes en nuestro mundo de hoy? ¡Absolutamente! No falta ni uno. Entonces, dice Jesús, “Cuando veáis todas estas cosas, sepan que estoy cerca, a las puertas” (Mateo 24:33).
El regreso de Cristo, por tanto, es inminente. Y cuando Él venga, entonces, y solo entonces, habrá verdadera paz y unidad basada en los principios de Su Palabra. Las "cosas anteriores pasarán" (Apocalipsis 21: 4). Y hasta que llegue ese día trascendental, podemos tener paz en nuestros corazones. Es una muestra de la paz y el descanso celestiales que le espera al pueblo de Dios. ¡Que Cristo apresure su venida!
Fuentes
[1] https://www.oikoumene.org/organization/ecumenical-council-of-churches-in-the-slovak-republic
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