La intensa ola de calor que afecta a Estados Unidos desde hace varios días y la violenta tormenta eléctrica que lo afectó el viernes pasado, deja al menos 19 muertos, mientras que 1,8 millones de personas siguen aún sin energía eléctrica.
"La ola de calor prosigue en buena parte del este y centro de Estados Unidos, con temperaturas previstas para la tarde (de este martes) de hasta 8 grados por encima de lo normal", señaló el Servicio Nacional de Meteorología.
"Combinado con un fuerte nivel de humedad, se llegará a peligrosos registros de calor de hasta 40-43 grados en lugares como Minneapolis, Chicago, Kansas City y St. Louis", agrega.
Por otra parte, una violenta tormenta eléctrica el viernes en la noche provocó cortes en el suministro de energía que afectaron a unos 4 millones de personas el fin de semana, cifra que bajó a 1,8 millones este martes.
En vísperas del feriado del 4 de julio, se cancelaron muchas festividades, fundamentalmente los fuegos artificiales, tanto en Maryland como Indiana y Colorado, más al oeste, donde a las altas temperaturas se suman a una sequía que ha causado grandes incendios que han dejado dos muertos.
En el sitio Accuweather.com, el meteorólogo Alex Sosnowski alertó contra los riesgos de nuevas "tormentas que se desplazan rápidamente acompañadas de fuertes ráfagas" en la jornada del martes, temperaturas aún más elevadas y potenciales tormentas para el miércoles.