El suceso ha tocado especialmente a la comunidad evangélica de Brasil, cada vez más numerosas, de la que los accidentados –de clase pobre- eran parte.
14 DE JULIO DE 2013, BRASILIA
Diez personas han muerto y 25 han resultado heridas, cinco de ellas de mucha gravedad, en el accidente de un autobús fletado por una iglesia evangélica en el que viajaban 42 personas de esta confesión. La tragedia ocurrió en la carretera de São José do Goiabal, en el Estado brasileño de Minas Gerais, a 184 kilómetros de Belo Horizonte.
El accidente ha conmovido a Brasil más si cabe porque las víctimas son un grupo de fieles de clase humildes pertenecientes a la Iglesia de Asambleas de Dios, que se dirigían a Setubinha, a 500 kilómetros de Belo Horizonte, para inaugurar un nuevo templo de dicha confesión evangélica.
Los 25 heridos, cinco de ellos muy graves, fueron ingresados al Hospital Municipal de Governador Valadares.
El accidente ha conmovido a Brasil más si cabe porque las víctimas son un grupo de fieles de clase humildes pertenecientes a la Iglesia de Asambleas de Dios, que se dirigían a Setubinha, a 500 kilómetros de Belo Horizonte, para inaugurar un nuevo templo de dicha confesión evangélica.
Los 25 heridos, cinco de ellos muy graves, fueron ingresados al Hospital Municipal de Governador Valadares.
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