jueves, 18 de enero de 2024

La relación de los miembros de la iglesia


Cada hombre que lucha para vencer, tendrá que contender con sus propias debilidades; pero como es mucho más fácil ver las faltas ajenas que las propias, debiera manifestar más diligencia y severidad consigo mismo que con los demás. Todos los miembros de la iglesia, si son hijos e hijas de Dios, pasarán por un proceso de disciplina antes de poder ser luces en el mundo. Dios no convertirá a los hombres y las mujeres en conductos de luz, mientras estén en las tinieblas y se conformen con permanecer en ellas, sin hacer esfuerzos especiales para relacionarse con la Fuente de la luz. Los que sientan su propia necesidad y se inciten a sí mismos a la reflexión más profunda y a la oración y acción más fervientes y perseverantes, recibirán ayuda divina. Cada uno tiene mucho que desaprender respecto de sí mismo, y también mucho que aprender. Debe deshacerse de antiguas costumbres, y la victoria se puede obtener únicamente mediante empeñosas luchas para corregir estos errores y la plena recepción de la verdad para poner en práctica sus principios, por la gracia de Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Confiadas palabras de despedida

[Del último mensaje directo de la Sra. Elena G. de White a la iglesia] No espero vivir mucho. Mi obra est...