En cuanto a la cantidad requerida, Dios ha especificado que sea la décima parte de los ingresos. Esto queda a cargo de la conciencia y generosidad de los hombres, cuyo juicio debe ejercerse libremente en este asunto del diezmo. Y aunque queda librado a la conciencia, se ha trazado un plan bastante definido para todos. No se requiere compulsión alguna.
En la dispensación mosaica, Dios pedía de los hombres que diesen la décima parte de todas sus ganancias. Les confiaba las cosas de esta vida, como talentos que debían devolver perfeccionados. Ha requerido la décima parte, y la exige como lo mínimo que le debemos devolver. Dice: Os doy las nueve décimas, y os pido una; es mía. Cuando los hombres retienen el diezmo, roban a Dios. Además del diezmo, se requerían ofrendas por el pecado, ofrendas pacíficas y de agradecimiento a Dios. Todo lo que se retiene de lo que Dios pide, o sea el diezmo, queda registrado en los libros del cielo como un robo hecho a él. Los que lo cometen defraudan a su Creador, y cuando se les presenta este pecado de negligencia, no es suficiente que cambien su conducta y empiecen desde entonces a obrar según el debido principio. Esto no corregirá las cifras escritas en los registros celestiales por su desfalco de la propiedad que se les ha confiado para que la devuelvan al Prestamista. Deben arrepentirse de su infidelidad para con Dios, y de su vil ingratitud. “¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? Los diezmos y las primicias. Malditos sois con maldición, porque vosotros, la nación toda, me habéis robado. Traed todos los diezmos al alfolí, y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y vaciaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.” Malaquías 3:8-10. Aquí se promete que si se traen todos los diezmos al alfolí, Dios derramará su bendición sobre los obedientes. “Increparé también por vosotros al devorador, y no os corromperá el fruto de la tierra; ni vuestra vid en el campo abortará, dice Jehová de los ejércitos. Y todas las gentes os dirán bienaventurados; porque seréis tierra deseable, dice Jehová de los ejércitos.” Vers. 11, 12. Si todos los que profesan la verdad cumplen con los requerimientos de Dios en cuanto a dar el diezmo, que Dios llama suyo, la tesorería estará ampliamente provista para llevar a cabo la gran obra de salvar a los hombres. Dios da al hombre los nueve décimos, mientras reclama un décimo para fines sagrados, así como dió al hombre seis días para su trabajo y se reservó y puso aparte el séptimo día para sí. Porque, como el sábado, el diezmo de las entradas es sagrado. Dios se lo ha reservado. El llevará a cabo su obra en la tierra con las entradas procedentes de los recursos que confió al hombre. Dios exigía que su antiguo pueblo asistiera a tres asambleas anualmente. “Tres veces cada un año parecerá todo varón tuyo delante de Jehová tu Dios en el lugar que él escogiere: en la solemnidad de los ázimos, y en la solemnidad de las semanas, y en la solemnidad de la cabañas. Y no parecerá vacío delante de Jehová: Cada uno con el don de su mano, conforme a la bendición de Jehová tu Dios, que te hubiere dado.” Deuteronomio 16:16, 17. Nada menos que una tercera parte de sus entradas se consagraba a fines sagrados y religiosos. Cuandoquiera que los hijos de Dios, en cualquier época de la historia del mundo, ejecutaron alegre y voluntariamente el plan de la benevolencia sistemática y de los dones y ofrendas, han visto cumplirse la permanente promesa de que la prosperidad acompañaría todas sus labores en la misma proporción en que le obedeciesen. Siempre que reconocieron los derechos de Dios y cumplieron con sus requerimientos, honrándole con su substancia, sus alfolíes rebosaron; pero cuando robaron a Dios en los diezmos y las ofrendas, tuvieron que darse cuenta de que no sólo le estaban robando a él, sino que se defraudaban a sí mismos; porque él limitaba las bendiciones que les concedía en la proporción en que ellos limitaban las ofrendas que le llevaban.Examinadlo todo; retened lo bueno. Absteneos de toda forma de mal. 1 Tesalonicenses 5: 21-22_ Espacio de análisis de los acontecimientos actuales relacionados con la profecía bíblica
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
- 
En este mensaje claro y práctico, el Pastor Andrés Portes aborda la importancia de cuidar las relaciones familiares desde una perspectiva b...
 - 
Por supuesto, aquí tienes una descripción para el vídeo y una lista de frases clave SEO: Descripción del Vídeo: En este inspirador sermón t...
 - 
 - 
Descubre el poder transformador de la oración con el Pastor Andrés Portes en este inspirador sermón titulado "Así se VENCE CON ORACIÓN...
 - 
¿PORQUÉ LA GENTE LE TIENE MIEDO AL APOCALIPSIS? | PASTOR ANDRÉS PORTES, A&R CANAL SERMON ADVENTISTA En este mensaje inspirador y prof...
 - 
Descubre cómo el fracaso puede transformarse en un camino hacia el éxito en este inspirador sermón del Pastor Andrés Portes. Acompáñanos e...
 - 
Bienvenidos a un inspirador mensaje del Pastor Andrés Portes en A&R Canal Sermones Adventistas. En este video, exploraremos cómo ser b...
 - 
Descubre un mensaje poderoso sobre conocer a Cristo y profundizar en la vida espiritual. En este sermón del Pastor Andrés Portes, de A&...
 - 
porfavor apoya a este miniterio para poder seguir traduciendo mas contenido como este, 52 566 212 9062
 - 
Las decisiones del último día dependen de nuestra dadivosidad práctica. Cristo reconoce todo acto de bene...
 
No hay comentarios:
Publicar un comentario