viernes, 13 de febrero de 2015

LA HORA DE PRUEBA

Estatua de la Virgen de Lourdes estremece Argentina: No está pero todos la ven
 
 Foto: Cortesía santuario Nuestra Señora de Lourdes
 
BUENOS AIRES, 13 Feb. 15 / 06:05 am "http://www.aciprensa.com/" target=" Noticias 
Todos los que visitan la capilla del santuario Nuestra Señora de Lourdes, de Alta 
Gracia (Argentina) son testigos de un hecho que aún no encuentra explicación. En la 
hornacina del retablo ubicado sobre el altar se ve una imagen de la Virgen a pesar 
que el espacio está, sin lugar a dudas, vacío.
https://www.aciprensa.com/noticias/estatua-de-la-virgen-de-lourdes-estremece-argentina-
no-esta-pero-todos-la-ven-66545/ 
 
  
 
"Muchos 
me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu 
nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y 
entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad. 
"(Mat. 7: 22, 23). 

No necesitamos ser engañados. Pronto ocurrirán 
escenas maravillosas con las cuales Satanás estará estrechamente relacionado. La 
Palabra de Dios declara que Satanás obrará milagros. Hará enfermar a la gente y 
después quitará repentinamente de ella su poder satánico. Eso hará que se 
considere sanados a los enfermos. Estas obras de curación aparente pondrán a 
prueba a los adventistas. Muchos que tienen gran luz dejarán de andar en la luz, 
porque no han logrado ser uno con Cristo. (Nota: MS2, 61.*) 

Vi a nuestro 
pueblo en gran angustia, llorando, orando y reclamando las fieles promesas de 
Dios, en tanto que los impíos estaban alrededor de nosotros burlándose y 
amenazando con destruirnos. Ridiculizaban nuestra debilidad, se mofaban de 
nuestra insignificancia numérica y nos vituperaban con palabras concebidas para 
ofender profundamente. Nos acusaban de haber adoptado una posición independiente 
de todo el resto del mundo. Nos habían quitado nuestros recursos de modo tal que 
no podíamos comprar ni vender y señalaban nuestra abyecta pobreza y nuestra 
agobiante situación. No lograban comprender cómo podíamos vivir apartados del 
mundo. Según ellos, dependíamos del mundo y debíamos admitir sus costumbres, 
prácticas y leyes, o salir de él. Si en verdad éramos el único pueblo del mundo 
que gozaba del favor divino, las apariencias indicaban en forma aterradora todo 
lo contrario. Los impíos aseguraban que tenían la verdad, que entre ellos se 
efectuaban milagros, que los ángeles del cielo les hablaban y andaban a su lado, 
que se manifestaban entre ellos un gran poder, señales y prodigios, y que ése era el 
milenio temporal que habían aguardado durante tanto tiempo. El mundo entero se 
había convertido y aceptado la ley dominical, en tanto que ese grupo pequeño y 
débil seguía desafiando las leyes terrenales y las divinas, y afirmando ser el 
único poseedor de la verdad. (Nota: Carta B-6, 1884.*) 

El pueblo de Dios 
no debe afirmar su seguridad en la realización de milagros, porque Satanás 
falsificaría cualquier milagro que se realizara. . . Deberá afirmarse en la 
Palabra viviente: "Escrito está". 208 (Nota: MS2, 63

No hay comentarios:

Publicar un comentario

El plan de Dios para nuestras casas editoriales

“Vosotros sois mis testigos, dice Jehová,” para “publicar libertad a los cautivos, y a los presos abertura de la cárcel; a promulgar ...