25 de junio
Por lo cual, salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, y no toquéis lo inmundo; y yo os recibiré. 2 Corintios 6:17.
Por lo cual, salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, y no toquéis lo inmundo; y yo os recibiré. 2 Corintios 6:17.
Como pueblo que guarda los mandamientos de Dios, debemos salir de las ciudades. Tal como lo hizo Enoc, debemos trabajar en las ciudades pero no vivir en ellas.66EE, 61.
La verdad debe ser dicha, ya sea que los hombres quieran escucharla o pasarla por alto. Las ciudades están llenas de tentaciones. Debiéramos planificar nuestra obra de tal manera que mantengamos a nuestros jóvenes tan lejos como sea posible de esta contaminación.
Las ciudades deben ser trabajadas desde puntos ubicados fuera de ellas. Dijo el mensajero de Dios: “¿No hay que amonestar las ciudades? Sí, pero no con el pueblo de Dios viviendo en ellas, sino por medio de sus visitas, para advertir a sus habitantes de lo que está por sobrevenir a la tierra”.68EE, 61.
Cuando la iniquidad abunda en una nación, siempre se ha de escuchar una voz de amonestación e instrucción, tal como la de Lot, que fue oída en Sodoma. Pero Lot podría haber evitado muchos males a su familia, si no hubiera instalado su hogar en esa ciudad malvada y corrompida. Todo lo que Lot y su familia hicieron en Sodoma podría haber sido hecho aun cuando hubieran vivido a cierta distancia de la ciudad. Enoc caminó con Dios, y sin embargo no vivió en medio de una ciudad contaminada con toda clase de violencia y maldad, como Lot en Sodoma.69EE, 61, 62.
[Enoc] no instaló su morada entre los impíos... Se ubicó con su familia donde la atmósfera fuera lo más pura posible. De vez en cuando visitaba a los habitantes del mundo para darles el mensaje que Dios le había dado... Después de proclamar su mensaje, siempre llevaba consigo a su lugar de retiro a algunos que habían aceptado la amonestación.70T