d
Tocad trompeta |
Posted: 05 May 2017 01:45 PM PDT
La obra del Espíritu se asemeja a la lluviaAsí como el rocío y la lluvia caen al principio para que la semilla germine, y luego para que la cosecha madure, así se da el Espíritu Santo para que lleve a cabo, a través de sus etapas, el proceso del crecimiento espiritual. La maduración del grano representa la terminación de la obra de la gracia de Dios en el alma. Mediante el poder del Espíritu Santo se ha de perfeccionar en el carácter la imagen moral de Dios. Debemos ser totalmente transformados a la semejanza de Cristo.La promesa de la lluvia tardíaAntes de que los juicios de Dios caigan finalmente sobre la Tierra, habrá entre el pueblo del Señor un avivamiento de la piedad primitiva cual no se ha visto nunca desde los tiempos apostólicos. El Espíritu y el poder de Dios serán derramados sobre sus hijos.Los poderosos efectos de las dos lluviasEn ningún momento de nuestra experiencia podemos prescindir de la ayuda que nos capacitó para comenzar. Las bendiciones recibidas en ocasión de la lluvia temprana nos son necesarias hasta el mismo fin...Al buscar a Dios para que nos conceda el Espíritu Santo, él producirá en nosotros mansedumbre, humildad de mente y una consciente dependencia de Dios con respecto a la lluvia tardía que trae perfección. Deberíamos orar fervientemente por el poder del Espíritu SantoDeberíamos orar tan fervientemente por el descenso del Espíritu Santo como lo hicieron los discípulos en el Día de Pentecostés. Si ellos lo necesitaban en aquel entonces, nosotros lo necesitamos más hoy en día.La reforma debe acompañar al reavivamientoDeben producirse un reavivamiento y una reforma bajo el ministerio del Espíritu Santo. El reavivamiento y la reforma son dos cosas diferentes. El reavivamiento significa una renovación de la vida espiritual, un avivamiento de las facultades de la mente y el corazón, una resurrección de la muerte espiritual. La reforma significa una reorganización, un cambio en ideas y teorías, en hábitos y prácticas. La reforma no producirá el buen fruto de justicia a menos que esté conectada con el reavivamiento del Espíritu. El reavivamiento y la reforma han de hacer su obra designada, y al hacerlo deben fusionarse.No todos recibirán la lluvia tardíaSolo los que estén viviendo a la altura de la luz que tienen recibirán más luz. A menos que estemos avanzando diariamente en la ejemplificación de las virtudes cristianas activas, no reconoceremos las manifestaciones del Espíritu Santo en la lluvia tardía. Podrá estar derramándose en los corazones de los que están en torno de nosotros, pero no lo percibiremos ni lo recibiremos.Seguidores de Cristo en todas las iglesiasEn el capítulo 18 del Apocalipsis, se exhorta al pueblo de Dios a que salga de Babilonia [vers. 4]. Según este pasaje de la Escritura, muchos del pueblo de Dios deben estar aún en Babilonia. Y ¿en qué comunidades religiosas se encuentra actualmente la mayoría de los discípulos de Cristo? Sin duda alguna, en las diversas iglesias que profesan la fe protestante.A pesar de las tinieblas espirituales y del alejamiento de Dios que se observan en las iglesias que constituyen Babilonia, la mayoría de los verdaderos discípulos de Cristo se encuentran aún en el seno de ellas. El corazón del último mensaje de DiosVarios me han escrito preguntándome si el mensaje de la justificación por la fe es el mensaje del tercer ángel [Apoc. 14:9-12], y he contestado: “Es el mensaje del tercer ángel en verdad”.El mensaje de la justicia de Cristo ha de resonar de un extremo de la Tierra hasta el otro para preparar el camino del Señor. Esta es la gloria de Dios que termina la obra del tercer ángel. Dios empleará medios que nos sorprenderánPermítame decirle que el Señor actuará en esa etapa final de la obra en una forma muy diferente de la acostumbrada, contraria a todos los planes humanos. Habrá entre nosotros personas que siempre querrán controlar la obra de Dios y dictar hasta los movimientos que deberán hacerse cuando la obra avance bajo la dirección de ese ángel que se une al tercero para dar el mensaje que ha de ser comunicado al mundo. Dios empleará formas y medios que nos permitirán ver que él está tomando las riendas en sus propias manos. Los obreros se sorprenderán por los medios sencillos que utilizará para realizar y perfeccionar su obra en justicia.Niños proclaman el mensajeCuando las inteligencias celestiales vean que los hombres no presentan más la verdad en su sencillez, como lo hizo Jesús, los mismos niños serán movidos por el Espíritu de Dios y saldrán a proclamar la verdad para este tiempo.Muchos adventistas rechazarán obstinadamente la luzEn las iglesias [adventistas del séptimo día] habrá una manifestación maravillosa del poder de Dios, pero no obrará en favor de los que no se han humillado ante el Señor ni abierto la puerta del corazón mediante la confesión y el arrepentimiento. En la manifestación de ese poder que ilumina la Tierra con la gloria de Dios, solo verán algo que en su ceguera considerarán peligroso, algo que despertará sus temores, y se afirmarán para resistirlo. Debido a que el Señor no actúa de acuerdo con sus ideas y expectativas, se opondrán a la obra. “¿Por qué –dicen– no deberíamos nosotros conocer al Espíritu de Dios, cuando hemos estado en la obra por tantos años?”Miles convertidos en un díaHabrá miles convertidos a la verdad en un día, los cuales, en la undécima hora, verán y reconocerán la verdad y los movimientos del Espíritu de Dios.Influencia de la página impresaMás de mil personas se convertirán en un solo día, la mayoría de las cuales adjudicarán sus primeras impresiones a la lectura de nuestras publicaciones.Es también, en gran medida, por medio de nuestras imprentas como debe cumplirse la obra de aquel otro ángel que baja del cielo con gran potencia y alumbra la Tierra con su gloria [Apoc. 18:1]. OraciónOremos por el derramamiento especial del Espíritu Santo en nuestra vida, para que seamos instrumentos en las manos de Dios. |